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Mirad lo que me he
encontrado. El asombro y la sorpresa es mucha. No puedo entenderlo por más que
trato.
He encontrado una oración
de las feministas, oración por el aborto. Suena a un padrenuestro destrozado
por la maldad de las palabras. Suena como mofa, a una oración tan sublime como
el Padrenuestro. Quiero pensar que me
equivoco, que no pensaron en ningún
momento sobre esta oración, herencia que nos deja Jesús.
Como me gustaría acercarme
a ellas, mirarlas a los ojos y hablarles con mucha ternura y con verdadera
delicadeza. Pero reconozco, que no están
en la misma medida de recibir, de hablar tranquilamente, de exponer sus puntos
de vista sin apasionamiento, sin violencia.
Ellas no han
pensado en un pequeño detalle. Un detalle que les ha dado la vida. Sus amadas
madrecitas tuvieron la delicadeza de amarlas, cuidarlas y defenderlas mientras
se desarrollaban en sus vientres. Ellas no han pensado que sus mamas pudieron,
muy bien, pensar y tomar la decisión de terminar con sus embarazos. ¿Qué hubiera
pasado? Hubiera perecido, se hubieran tronchado su derecho a vivir… así como ahora quieren hacer con sus pequeños por
nacer.
¿Qué les mueve? ¿Por
qué el deseo morboso de destruir la vida de un niño, niño indefenso e inocente,
que nada puede hacer para defenderse? Un niño que tiene todo el derecho, como
todos lo hemos tenido, de nacer, de vivir…el niño no-nacido… que es un bebe…
aunque los médicos abortistas niegan que sea humanos, que sea un bebe…porque no
les conviene que las jóvenes que han de abortar reconozcan que en su vientre
hay un ser humano desarrollándose, un bebe…
Me pregunto, ¿por
qué no los dan en adopción? Tantos
matrimonios deseosos de ser padres y no pueden. Tantos hogares iluminados por el
gozo y la alegría de recibir a esos niños por nacer, que se les niega la
oportunidad. ¿No es esta una solución para
tantas mujeres que no desean ser madres, pero si desean participar de la
libertad de vivir la intimidad que está reservada al matrimonio. Libertad que
se convierte en placer sexual, como si fuera un deporte. No les interesa la
maternidad… y mucho menos formar un hogar… Cuánta ignorancia. Cuanto peligro
para la eternidad.
He visto vídeos sobre este tema. Las he visto participando en sus marchas. He podido
verlas como ciegas, sordas, y atadas a una sola idea… matar a sus hijos en el
vientre…Decirlo cuesta… cuesta mucho… porque son mujeres… y la mujer es en sí la
parte delicada, la parte que sabe sacrificarse hasta dar la vida por los que
ama, por sus hijos, por su familia… y estas jóvenes, estas feministas, hay que
reconocer aunque nos duela, que se vuelven antítesis de la verdadera feminidad,
esa que es representada por nuestra bendita madre celestial. Nadie más
femenina, más mujer, más digna, más delicada, que la madre de Cristo, que la
madre de Dios. Ella es la modelo a seguir, a imitar, para toda mujer.
Y no puedo dejar de
preguntar: ¿Quién les ha podido cegar? ¿Quién es el autor de esta sordera? ¿Quién
ha sido capaz de encadenarlas y atarlas
a una idea criminal que lleva a la muerte eterna?... de tal forma que no las
dejan pensar, meditar, reflexionar en lo que están luchando.
¿Quién ha tenido tanto poder para llenarles el alma de tanto odio hacia la Iglesia, hacia
todos los que difieren de sus luchas y derechos? No hay más que verlas… a mí, sinceramente me dan
pena… y más cuando pienso que se juegan la eternidad… si no se arrepienten a
tiempo… pero esto es algo que ellas no pueden, no quieren y no conocen… Dios mío,
cuantas ya se han perdido para la eternidad para sorpresa de ellas…
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Sigo preguntándome… ¿Quién las adoctrina, las educa, las convierte en
terroristas del no-nacido, de sus propios hijos? Ese alguien les ha llenado el alma de fuego, pero no es el fuego
que dignifica, fuego que ennoblece, fuego que santifica, no, no es el fuego de
Dios, del Espíritu Santo. Todo lo contrario, les llenan del fuego de la maldad;
ese fuego se desborda en violencia; en irrespetuosidad hacia todo el que consideran
enemigos de su ideal; fuego que les
provoca dañar propiedades públicas o
privadas como si fueran robot, sin conciencia… Sí, hay algo, hay alguien... que les
ha colocado unas gafas que no lesdejan ver con claridad la verdad; alguien o algo
que las manipula, las mueven a atacar violentamente, a desfigurarse,
desfigurar la verdadera feminidad por una feminidad morbosa, burlona, que goza denigrando, despreciando a los que luchan por
la vida. ¿Cómo poder entenderlas? ¿No creen que esto, es material para
sentirnos verdaderamente apenados por sus almas, que ciegas corren hacia el precipicio
de la eternidad… si no se arrepienten con tiempo?
Pero, pasemos a la oración que encontré… Por favor, deben leerla con mucho
detenimiento y sin apasionamiento… Luego les presento un pequeño análisis en
forma de preguntas.
Oración de las feministas pro aborto en Argentina
Concédeme el derecho a decidir sobre
nuestro cuerpo.
Y danos la gracia de no ser ni vírgenes ni madres.
Líbranos de la autoridad del Padre, del Hijo y
del Espíritu Santo para que seamos nosotras las que
decidamos por nosotras. Ruega por que el poder judicial
no haga suyos los mandatos de la Iglesia y ambos nos
libren de su misógina opresión. Venga a nosotras el
derecho a cuestionar si es bendito el
fruto de nuestro vientre.
No nos dejes caer en la tentación de no
luchar por
nuestros derechos. Y concédenos el
milagro de la
legalidad del aborto en Argentina. Así
sea.
Decidme
¿si no les suena esta oración como un Padre Nuestro destrozado por el contenido
de maldad en sus palabras…? ¿No les suena a una mofa? ¿Una burla contra
la fe? ¿O me equivoco? Quiero equivocarme y pensar que no es cierto… que sus
corazones no estén tan endurecidos, que sus voluntades no están tan enfermas… porque
de lo contrario están jugando con su eternidad…
Ahora les presento mi pequeño análisis… en forma de preguntas…
Concédeme el derecho a
decidir sobre nuestro cuerpo. ¿A quién va dirigida la oración? ¿A quién le piden que le concedan?
Y
danos la gracia de no ser ni vírgenes ni madres. ¿Renuncian a la maternidad para siempre?
¿Renuncian a la virtud de la castidad?
Líbranos
de la autoridad del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo para que seamos
nosotras las que decidamos por nosotras. ¿Renuncian públicamente a Dios, a la Santísima Trinidad? Entonces ¿están
ellas reconociendo no pueden decidir sobre la vida, al reconocer públicamente la
autoridad de Dios, de la Santísima Trinidad
como autor de la vida? ¿Están reclamando el derecho de la libertad que Dios les ha concedido, para
escoger su derecho a asesinar a sus hijos en el vientre y ser premiadas por el
poder judicial?
Ruega
por qué el poder judicial no haga suyos los mandatos de la Iglesia y ambos nos
libren de su misógina opresión. ¿A quién le están pidiendo
que ruegue por ellas? Se sienten oprimidas por parte del poder judicial y de la
Iglesia y ¿no se sienten que oprimen criminalmente a sus hijos por nacer al
negarles el derecho a nacer?
Venga
a nosotras el derecho a cuestionar si es bendito el fruto de nuestro vientre. ¿No creen que esto sea una mofa a la oración del avemaría,
utilizar las palabras dirigidas a nuestra Madre Celestial? Acaso, ellas abogan, por el derecho de rebelarse contra el
don de la vida que otorga Dios, para
juzgar si ese fruto que llevan en el vientre es bendito o maldito y escoger la solución
criminal de eliminarlo sin piedad?
No
nos dejes caer en la tentación de no luchar por nuestros derechos. ¿A quién le están pidiendo ayuda? ¿Están
pidiendo derechos a matar indiscriminadamente a un ser humano indefenso que no
puede defenderse de su propia madre? ¿Pro-vida es una tentación para ellas?
Y
concédenos el milagro de la legalidad del aborto en Argentina. Así sea. ¿A quién le están pidiendo
el milagro si han renunciado públicamente a Dios? ¿El derecho a asesinar la
persona más inocente e indefensa que se encuentra en el vientre de la madre, se
puede considerar un milagro la legalización? ¿Quién puede tener tanto poder
para hacer milagros y no ser Dios? ¿Quién
tiene el poder del odio para querer la muerte del no-nacido?
Hijitos, nos queda orar… nos queda levantar nuestra
voz en un clamor unidos a un NO AL ABORTO… es el crimen mas abominable de
nuestros tiempos… es la puerta que ha abierto toda clase de abominaciones y
aberraciones, esas que quieren legalizar como conductas normales en nuestra
sociedad mundial.
Dios nos conceda su santa misericordia y defienda a
sus hijos, aun a los pobres pecadores del enemigo mortal de las almas… ese que
tanto nos odia y solo quiere nuestra destrucción. Tristemente hay quien le
escucha y le sigue como si fuera lo mejor que les ha sucedido…
OREMOS…
Desde la Soledad del Sagrario
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