¿Examen
de Conciencia para Niños?... si… pero solo si los quieres santos…
Hay madres… y hay MADRES… ¿Cuál es la diferencia? Sencillo…hay madres que se preocupan por todo menos del cultivo de la vida interior… pero hay MADRES que su objetivo principal es el cultivo de la vida interior… esa vida espiritual que todos debemos cultivar caminando por el camino de la santidad.
Estas madres inician su misión desde que llevan a sus pequeños bebes en las
entrañas… de ir hablándoles y guiándolos por el camino espiritual. Son aquellas
madres en estado de maternidad que sacan
tiempo siempre… buscando un lugar tranquilo en el hogar o en la terraza, se sientan cómodamente y en ese
ambiente de recogimiento inician la lectura de la biblia, o biografía de algún santo,
leen en voz alta, intercalando comentarios donde hacen participes al pequeño bebe
que llevan en sus entrañas. Son momentos hermosos donde madre y bebe van
tejiendo el amor y el gusto por el cultivo de la vida espiritual.
Se imaginan como los ángeles custodios
rodearan a madre y bebe con santa alegría… como la ternura de la Mater al
contemplar la escena hará derramara gracias abundantes sobre madre y bebe… y
Dios mirara con complacencia y bondad a madre tan especial y sabia que inicia a
su bebe desde sus entrañas a catequizar con
tanto esmero y delicadeza.
Ya nacidos estas madres siguen llevando por el camino del cultivo de la
vida interior como algo normal, sencillo y contagiante e irán realizando toda clase de actividades
atractivas y divertidas logrando despertar en sus pequeños un amor exquisito y siempre en aumento hacia Dios… el deseo de siempre,
siempre darle gusto a Dios obedeciéndolo en lo pequeño y en lo grande.
Ellas tienen bien claro su misión y vocacion de madre... que simplemente
consiste en llevar a sus hijos hacia la santidad, porque así Dios lo pide,
iniciandolos, desde que sus pequeños pueden hablar bien…a familiarizarse con el
examen de conciencia.
Y es tan fácil. Los niños pequeños siempre tienen sed de aprender. Es la
edad más apropiada para ir enseñándoles a cultivar una conciencia recta,
virtudes solidas y una amistad sabrosa con Dios…, con la Mater…, con el Ángel
Custodio…, con los Santos.
Van poquito a poquito llevándolos a desarrollar ese momento de verse a sí
mismo con sinceridad y claridad, al final del día, y descubrir en que se fallo,
que virtud se dejo de cultivar (ejemplo: mantener el buen humor, paciencia,
decir siempre la verdad y si no se puede mantenerse callado, etc.)…
En qué momento precioso del día se dejo de hablar con Dios y de pedirle
ayuda…
Que virtud se cultivo con facilidad, prontitud y alegría (ejemplos: ayudar
a alguien, obedecer a papá y a mamá, recoger los juguetes después de jugar,
etc.)…
Cuan contento estuvo Dios de todas
las palabras y acciones realizadas por los pequeños durante el día…
Mama con mucho amor y delicadeza los lleva a arrepentirse con sinceridad y
tomar valientemente la decisión de mañana ser más cuidadosos en su pequeño ideal de ser
“amigo intimo de Dios”.
Terminando el examen particular, mamá les deja decir en sus propias
palabras una pequeña oración a Jesús y a
la Mater… de esta forma les van enseñados
a tener confianza en hablarles a Jesús y
a la Mater.
Estas madres llevan con dedicación y esmero a sus hijos por el camino de la
santidad… al final del camino verán abundante cosecha de santidad… porque han
guiado a sus hijos por el camino que los lleva directamente al Cielo…
A ti, Madre, quiero decirte que nunca es tarde para iniciar el cultivo de
la vida interior en sus hijos… si aun no lo has hecho… te invito a iniciar esa hermosa
catequesis de vida espiritual con tus hijos…
Desde la Soledad del Sagrario
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