¿Qué Diferencia existe en las Madres y los
Padres de los Niños Santos?
Es fácil de comprender. Las familias que se han decidido por la santidad
llevan el sello de una fidelidad constante y siempre en aumento a Dios y a su Iglesia.
Padres de los Niños Santos?
Son familias dadas a buscar y vivir intensamente el amor de Dios y a
convertirse en testimonios de una santidad brillante que acapara, deslumbra
y motiva la santidad de sus hijos.
Pocas veces se han dado niños santos, que han sido motivados no por
sus padres… pero si por un abuelo, una
abuela, un tío, o tía, alguien muy cercano a la familia que ha tenido cerca
muy cerca al niño llevándolo por el camino de la santidad.
Miremos bajo la lupa espiritual a estas familias para aprender de ellos.
Entremos en el hogar de Santo Domingo Savio. Es un hogar sumamente
acogedor, un ambiente cimentado en el amor a Dios y a la familia. Donde Dios se
encuentra en el centro del hogar… todo gira alrededor de Dios, de su amor, de
su divina voluntad.
Esta madre conocía muy bien que la herencia mayor que podía dar a su hijo era
conocer a Dios y sentirse amado por Dios y saberse hijo de Dios.
Madre sumamente sabia no perdió momento alguno, ingeniándose todas formas
de llevar a su pequeño a crecer en una sabrosa amistad con Dios. Por eso desde
muy pequeño le motivaba a amar a Jesús Eucaristía. Un ejemplo sencillo, de los
muchos que esta santa madre procuraba como devoción en su hijo, era “lanzarle
besos al sagrario”. Es por demás suponer
la dulzura, el amor, el convencimiento de las palabras de esta madre hacían entender
al pequeño Domingo que verdaderamente Jesús estaba escondido en el sagrario.
Su santa madre procuro encender en ese corazoncito el amor a Jesús Eucaristía,
logrando en el niño despertar un amor intenso a tal punto que deseaba
ardientemente recibirlo. Su deseo era tal que el párroco le concede recibir a Jesús
en su primera comunión a la edad de 7 años.
Además le enseño al pequeño Domingo a tener una familiaridad, una amorosa
amistad con su ángel custodio. En una ocasión
un campesino le pregunta si no tenía miedo de andar solo, cuatro kilómetros
diarios para ir a estudiar, y el niño muy resuelto le dice le contesta que no
anda solo porque su ángel esta con el siempre.
Su amada madre se dedico a enseñarle el camino de la santidad. Y el niño aprendió
muy bien porque vio a su madre caminar por ese camino de santidad.
Entremos, ahora, en el hogar de
santa Teresita del Niño Jesús. Asombrémonos de ver que todos sus miembros,
padres e hijas, unos santos y otros camino al altar.
Santa Teresita del Nino Jesús en su Diario de un alma, escribió que aprendió
a entender la santa misa contemplando el rostro de su padre. Muy pequeña acompañaba
a su padre a la Santa Misa y leía en el rostro de su padre el significado, el
sentido, la grandeza de la Santa Misa. ¿Cómo
sería ese sentimiento reflejado en el rostro de su santo padre?
Podemos pensar en los miles de padres y madres que van a la Santa Misa con
sus pequeños… ¿Sera la misma experiencia para sus hijos? ¿Podrán descubrir el
valor de la Santa Misa al mirar y contemplar el rostro de sus progenitores?
Nuestros hijos se alimentan de la fuente de nuestras creencias y convicciones. Los hijos son lo que sus padres son… ¿cristianos
mediocres? ¿buenos cristianos? ¿cristianos
santos?
Hoy en dia los/as padres y madres tiene que levantarse e ir contra la corriente de este mundo. Para poderlos llevar de manos Jesus y nuestra querida Mater.
ResponderEliminarEs la responsabilidad de los padres y madres guiar a sus hijos a crear conciencia de fe, de valores, de moral y de un compromiso verdadero, real… aceptando la doctrina de nuestra Iglesia que manifiesta la Voluntad Divina en todo momento. Hijos con Dios en el corazón… hijos caminando a la santidad… hijos plenamente llenos de felicidad y gracia divina… Un abrazo hija mia... saludo a la familia. !Que Dios les bendiga!!
ResponderEliminarGracias por este artículo, y si es muy difícil, pues como dice Lymari, hay que luchar contra las malas influencias de este mundo cada día más corrompido, sin embargo, Dios nos dará la sabiduría para poder lograrlo, primeramente en nosotros como Padres y así dar el ejemplo a nuestros hijos.
ResponderEliminarBendiciones!